miércoles, 25 de septiembre de 2013

EDIMBURGO

Castillo de Edimburgo
Por fin llegué a la ciudad de Edimburgo, a la que tantas veces había pensado visitar. Lo malo es que, en este viaje, sólo tenía día y medio para ello, por lo que me tuve que limitar en ver sólo el centro de la ciudad, centrarme en visitar la Old Town y la New Town ya que la mayor parte de las atracciones turísticas se concentran en estas dos secciones de la ciudad. Así que no había tiempo que perder, nada más dejar la bolsa en el albergue, que estaba muy bien situado en el Grassmarket, subí directo al castillo antes de que me lo cerraran porque sabía que iba a llevar bastante tiempo verlo todo.

Vistas de Princess Street y norte de la ciudad desde el castillo

Puerta del castillo
El castillo se alza imponente sobre la cima rocos de un antiguo volcán ya apagado y, desde ahí, vigila la ciudad. Tiene vistas espléndidas de toda la ciudad y un interesantísimo interior por descubrir y conocer su historia. Es una fortaleza increíble, es un gran complejo de edificios y fortificiones, que se empezaron a construir en el siglo XII, y que se ha venido completando y remodelando hasta el mismo siglo XX. Nada más entrar por la puerta del Rastrillo se encuentra a cada lado las estatuas de dos de los héroes de Escocia, William Wallace y Robert The Bruce. Ya una vez dentro se pueden ver las diferentes baterías, que hoy en día sirven como miradores, la Residencia del Gobernador, el Museo Nacional de Guerra... Hay cosas bastantes curiosas, como que el edificio más antiguo de todo el castillo, y puede que de la ciudad,  no es más que una pequeña ermita, la capilla de Santa Margarita. La historia y humor como muestran el cañón de las trece horas, que dispara todos los días a esa hora, explicando que es así debido a la "famosa" tacañería escocesa, de esa manera sólo gastan una bala de cañón y no 12 como hacen en otros muchos lugares. Varias exposiciones, como el Memorial Nacional de la guerra en donde está el nombre de todos los soldados caídos en las diferentes guerras en las que Escocia ha participado a lo largo de su historia, o los Honores de Escocia donde se encuentran las joyas de la Corona Escocesa y los objetos del tesoro real escocés, además de la Piedra del Destino sobre la que fueron coronados todos los monarcas escoceses hasta que los ingleses la secuestraron.
Salimos del castillo cuando ya lo estaban cerrando y empezaba a anochecer, así que dimos un paseo hasta Rose Street buscando un pub donde cenar, por cierto qué buenos estaban los haggis aunque muy parecido a la morcilla, y vivir la noche de la ciudad.
Tras una noche divertida de juerga, pintas y pubs, además de un pequeño concierto que encontramos en uno de los pubs, había que levantarse temprano para aprovechar el día y visitar la ciudad. Comenzamos con volver a la puerta del castillo y desde ahí atravesar toda la Royal Mile. Nada más empezar estaba The Hub, una antigua iglesia gótica que hoy en día es sede del Edinburgh International Festival (FRINGE) que se celebra durante el mes de agosto. Durante el recorrido por la Royal Mile nos vamos adentrando en pequeños callejones que nos encontramos a ambos lados (en algunos nos encontramos preciosos jardines privados, pequeñas plazas o restaurantes). Al llegar a High Street nos encontramos con la Catedral de ST Giles. En la nave central se puede ver una estatua de John Knox, líder de la Reforma escocesa e importante predicador que se convirtió en el primer pastor protestante de la catedral. En su plaza también se encuentra una estatua del filósofo David Hume, el cuál tiene el pulgar de su pie tan pulido debido a las leyendas que hay si lo frotas como p.ej. el aprobar los exámenes para los estudiantes, el volver a la ciudad para los viajeros (como en Canaletas)...
 
Continuamos por la Royal Mile, donde nos encontramos con la iglesia Tron, la casa de John Knox (hogar del líder de la reforma protestante en Escocia, y considerado el fundador de presbiterianismo), los edificios de The Canongate Tolbooth (antigua cárcel municipal, punto de cobro de peaje y sede de la policía donde ahora se encuentra el museo de vida social de la ciudad), el Parlamento de Escocia y el Museo Nacional de Escocia antes de llegar al Palacio de Holyroodhouse.
Canongate Tolbooth
Canongate Tolbooth
Canongate Tolbooth

Palacio de Holyrood es la residencia oficial de la familia real en Edimburgo y toma su nombre de una antigua abadía (hoy en ruinas, en sus jardines), la Abadia de Holyrood, del siglo XII. El Palacio se edificó junto a este edificio religioso como edificio anexo y finalmente creció tanto que de la abadía poco queda. Aún así, su parte más antigua todavía en pie data de 1529 y es la torre noroeste, los antiguos apartamentos reales de Jaimes V y su esposa Mary of Guise. Aunque cuando la casa real está de visita está cerrado (este verano, por ejemplo, por la boda de la nieta de la reina, cuyo nombre prefiero no recordar), vale la pena visitarlo. Es imprescindible visitar la habitación de la reina Mary, Queen of Scots (profundamente amada hoy en día y con un pasado sentimental algo turbulento… para más detalles sobre sus amantes tendréis que ir) y la Gran Galería, donde se exponen los retratos de 89 reyes de Escocia. A su lado está la Queen’s Gallery, que hace de sala de exposiciones temporales de arte de las colecciones reales.
Si os sobra el tiempo y todavía no os habéis cansado de caminar, podéis dar una vuelta por el parque de Holyrood Park e incluso, si os animáis, subir hasta la cima de Arthur’s Seat (poco recomendable si llueve, porque el terreno se pone algo resbaladizo): con 251 metros de altura, es el punto más elevado de la ciudad y la cima de un volcán que ya nadie recuerda cuándo se apagó. Se tarda unos 45 minutos en llegar hasta arriba de todo. Las vistas valen la pena, y mucho… 
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Se pueden ver tanto el Palacio de Holyrood como la abadía del mismo nombre que se encuentra en los jardines y que se encuentra en ruinas. El palacio ha servido como residencia a los reyes y reinas de Escocia y hoy en día es la residencia oficial de la familia real en Escocia. Tras el castillo hay un in menso parque por el que se puede llegar a un pequeño lago, o subir a la colina de Arthur's Seat, antiguo volcán que es el punto más elevado de la colina desde donde se pueden admirar las vistas de toda la ciudad.
Palacio de Holyrood
Vista panorámica de la ciudad en la subida a Arthur's Seat
Después del repecho de la subida y contemplar tranquilamente las vistas volvemos a bajar para volver a cruzar por delante del palacio y subir otra vez, no tanto como antes, a Calton Hill. Es una pequeña colina que se encuentra en el centro de la ciudad y donde puedes ver buenas vistas de esta y distinguir los distintos barrios como la Old town y la New Town, el castillo, Princess Street... De camino a la cima se cruza el cementerio de Old Calton, en donde se encuentra la tumba del filósofo David Hume y un monumento al poeta Robert Burns. Ya en la cima de la colina se encuentran varias construcciones o monumentos, como el National Monument, que es una copia inacabada del Partenón de Atenas, una torre en honor al almirante Nelson, el observatorio y un monumento al filósofo local Douglas Stewart.
Monumento a Robert Burns
 
National Monument
Vistas desde Calton Hill y monumento de Douglas Stewat (derecha)
Bajando desde la colina llegamos directamente a Princes Street, la calle principal y coomercial de la ciudad. Paseando por ella, además de sus numerosas tiendas nos encontramos con el Hotel Balmoral, que tiene una gran torre con un reloj que me recuerda al hermano pequeño del Big Ben, la estación de Waverley, los jardines de Princes Street, donde se encuentran el monumento al escritor Walter Scott y el National Scottish Gallery. Al final de los jardines están las iglesias St John y St Cuthbert con su pequeño cementerio y el Caledonian Hotel al otro lado de la calle. Ya continuamos bordeando por esta zona el monte del castillo para así llegar de nuevo al Grassmarket, plaza donde antaño se ajusticiaba públicamente a los culpables colgándolos de una horca, hoy es una plaza peatonal repletos de bares y restaurantes donde acabar perfectamente la jornada.
Grassmarket
Vista de Arthur's Seat desde Calton Hill
Vista del castillo desde Princes Gardens
Vista del castillo desde Arthur's Seat
Vista de Calton Hill desde Arthur's Seat

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